Hace poco salió un artículo en la revista Pediatrics sobre un estudio que muestra como unas caricaturas pueden ser más perjudiciales para el desarrollo de los niños que otras. En el estudio pusieron a niños de 4 años a ver un programa de televisión sobre una esponja que habla, otros a ver un programa de un niño que resolvía problemas y otros a pintar con crayolas, todos por un periodo de 9 minutos. Los niños que vieron el programa de la esponja tuvieron problemas a corto plazo con la memoria, la capacidad de concentración, la autorregulación, y la capacidad para resolver problemas, entre otras funciones ejecutivas. Mientras que los niños que pintaron o vieron el otro programa no tuvieron estas dificultades y obtuvieron mejores resultados en estas mismas pruebas. El estudio no aclara la causa de esto sin embargo se cree que es porque el programa de la esponja tiene un ritmo rápido, con un rápido cambio de escenas, y es demasiado irreal, comparándolo con el otro programa que tiene un ritmo más lento.
Como mama puedo decir que mi hija de 3 años ha aprendido mucho de algunos programas de televisión, desde comer frutas y verduras hasta los números en ingles, sin embargo creo que tenemos que ser muy cuidadoso no solo con lo que ven nuestros hijos sino también con la cantidad de tiempo que están frente al televisor.
Nuestros hijos están en etapa de crecimiento y desarrollo. El tiempo que pasan frente a la televisión es tiempo que ellos se están perdiendo de estimular su motricidad tanto fina como gruesa, de trabajar en su concentración, o de desarrollar su área social. Mientras que estar en el parque compartiendo con otros niños les estimula muchas más aéreas de su desarrollo.
Es importante que seamos muy cuidadosos con lo que ven nuestros hijos, no porque sea caricaturas o estén en un canal infantil significa que sean buenas. Sentémonos a ver un rato que es lo que ven nuestros hijos, algunas caricaturas van a un ritmo muy rápido que de seguro tienen algún efecto negativo, puesto que esto hace que los niños necesiten de mucho estimulo para permanecer concentrados. Algunos programas les faltan valores, fomentan la agresividad, la intolerancia con los demás, y la desobediencia e irrespeto con los mayores. Incluso cuando los programas son muy buenos las propagandas son desastrosas ya que el contenido de estas exponen a nuestros hijos a un sin número de cosas, antojándolos de juguetes y de comidas sin valor nutritivo que dificultan mucho nuestra labor como padres.
En esta sociedad moderna en que vivimos en que las relaciones ya son por medio de los teléfonos celulares, computadores y las redes sociales, creo que no está mal que nuestros hijos se expongan desde pequeños a estos medios de comunicación. Pero también creo que primero hay que aprender a gatear antes de caminar, por eso creo que primero nuestros hijos tienen que aprender a tener relaciones sociales, en las cuales se le preste atención al otro cara a cara antes de estarse comunicando por estos medios.
No estoy en contra de la televisión y los medios, ni mas faltaba, especialmente por el tipo de sociedad que le va tocar vivir a nuestros hijos…además también soy madre y agradezco esos minutos de paz que tenemos cuando nuestros hijos ven televisión, pero como dicen las abuelas… ni mucho que queme el santo ni tan poco que no lo alumbre… por esto estas son mis recomendaciones…
1. Limitar el tiempo de televisión a dos horas al día
2. Evaluar lo que ven tus hijos y decidir si está acorde con los valores de tu casa
3. Evitar a toda costa la programación de adultos
4. Evitar las caricaturas rápidas, sin lenguaje claro y que contengan violencia
5. Dedicarle un rato a saber que ven tus hijos y poder usar esto como tema de conversación para estimular el lenguaje de ellos y nos ayuda a crear un vinculo mayor con ellos
6. Estimularlo a que hable con otros amigos de su programa de televisión favorito, y así logramos que al acto pasivo de ver televisión, le saquen provecho para hacer relaciones sociales.
Estas no son pautas fáciles de cumplir, pero si logramos con la mayoría de estas, considero que logramos hacer que la televisión sea algo benéfico para nuestros hijos .